Siempre, siempre la misma historia. Esta vez la calesita me está mareando mucho, y ya no veo al sortijero. Podés quedarte quieto, podés aferrarte a todo lo que quieras, pero el mundo sigue girando a su ritmo, nadie te espera, y es posible que algun dia todos tengamos que bailar por uno valla a saber que pierna.
Porque sembramos para regar, para cuidar. Para recolectar en el tiempo lejano de la espera.
Todavía estoy esperando que un dia la calesita, me devuelva lo que perdi y tanto estoy esperando.
By ME.

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